El presidente del Partido Fuerza Nacional Progresista, Pelegrín Castillo, ha encendido las alarmas al atribuir a un plan de alta inteligencia al aumento de partos haitianos, registrándose 7,777 nacimientos de madres haitianas en la República Dominicana durante los últimos dos meses. Según el político, esta situación responde a un esquema meticulosamente diseñado para desestabilizar la isla y forzar una solución dominicana al problema haitiano.
– Estrategias Encubiertas –
Durante una entrevista en el programa Panorama de la Tarde, Castillo afirmó que esta operación no es casualidad. “Llevo años denunciando que esto forma parte de un plan cuidadosamente diseñado que se ejecuta desde hace tiempo. En 2017 se intensificaron una serie de eventos que aceleraron este proceso”, aseguró el dirigente político.
Según Castillo, las instituciones responsables de los sectores de Salud, Trabajo y Educación están al tanto de lo que sucede, aunque no todos comprenden las implicaciones profundas de este plan. Mencionó una metodología conocida como la “Ventana de Overton”, utilizada para avanzar estrategias impopulares mediante un asedio progresivo, haciendo que con el tiempo estas se perciban como inevitables.
– Riesgos para la Soberanía –
Castillo alertó que, si no se actúa con rapidez y determinación, el país enfrentará un desafío irreversible. “Solo una reacción unificada y valiente del pueblo dominicano puede detener esto”, declaró, enfatizando que los intentos de integrar un Estado débil y vulnerable como Haití solo traerán caos.
El político subrayó que la negación de los derechos esenciales tanto a República Dominicana como a Haití, países ubicados estratégicamente en el corazón de las Américas, podría desencadenar un conflicto de grandes proporciones con efectos devastadores para la región y el continente.
– Un Llamado a la Acción –
Pelegrín Castillo exhortó a los dominicanos a no subestimar el impacto de esta situación, señalando que más allá de los intereses externos, también hay una gran dosis de negligencia interna. “El que tenga dos dedos de frente debe entender que estamos enfrentando un problema que no solo afecta a nuestra soberanía, sino al equilibrio regional”, concluyó.
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